Juan Claudio Cifuentes no es un concierto, son muchos.

Por Juan Alberto García de Cubas

Juan Claudio Cifuentes no es un concierto, son muchos. No es  músico, pero los lleva a todos encima. Arriba pone 3 de noviembre, pero son casi todos los días. Y desde hace ya muchos años.   Es Mr. Jazz de este país. Es Cifu, para los amigos.

CIFU y JUAN ALBERTO GARCÍA DE CUBAS

No puedo evitar abrir esta sección, debería quizá estar en el menú principal, pero mejor entre músicos y en esta nueva aventura que tanto me ilusiona. Cifu fue el primero. Hace ya 30 años que le encontré en no sé qué emisora de radio, muy pronto me quedé pegado cual mosca sobre la miel en su revelador programa ‘Jazz entre amigos’. Fueron seis o siente años de programación en TVE, recuerdo la misión épica para seguir los cambios horarios del programa, pasaban de la primera cadena a la segunda, de horarios posibles a imposibles, al día siguiente había que madrugar, pero ahí estaba el VHS para verlo en otro momento. La lista de músicos, historias, músicas… que aprendimos sería interminable. Sus explicaciones, como las de Ebbe Traberg, eran verdaderos puentes que te colocaban en orillas que jamás hubieras pisado. Fue el abecedario y la biblia, la mejor literatura y la poesía más bella para entrar en la casa del Jazz.

También disfrutábamos de aquellos discos de Fonomusic, Hispavox o Movieplay con sus textos en las contraportadas,  caían en nuestras manos como cartas de navegación para seguir el viaje.  Y sus traducciones, libros, fascículos, … Son muchas cosas.

Cuántas veces le vimos apoyado así en la barra del bar de Jazz entre amigos.

El caso es que yo andaba dando vueltas desde hacía tiempo a la urgencia de un encuentro con Cifu. Quería hacerle mi pequeña declaración de admiración, mi personal homenaje desde Lo otro, decirle, ‘todo esto tiene mucho que ver contigo, maestro’ . Le conocí personalmente cuando colaboraba en la revista ‘Cuadernos de Jazz’, me acerqué a él para mandarle un caluroso abrazo de nuestro común amigo Michel Laverdure -experto en Jazz, amante de nuestro país y crítico de Jazz Magazine que me abrió las puertas de los festivales de jazz franceses-. Hace unos meses fui con mi amigo José Ramón Rubio -otro maestro del jazz- a escuchar a  Martial Solal en el ‘johnny’. Cifu se acercó a saludar a su amigo y, cuando se despidió, le dije a José Ramón, ‘algún día tendré que decirle a Cifu todo lo que ha significado para mí’. José Ramón, con grandes reflejos,  me agarró del brazo y, mientras me llevaba hacia él, me ordenó, ‘díselo ahora’. Así fue.

El día del concierto de Jorge Vistel y Edgar Van Asselt me llama José Ramón para decirme que viene acompañado. Ni más ni menos que traía a Cifu. ¡Uff!. Estas fotos recogen ese momento, para mi muy simbólico y lleno de sentido.

Edgar, Jorge, Juan Alberto, José Ramón Rubio y Raúl Mao

También estaba otra persona querida y biográficamente importante para mi. Raúl Mao, director de Cuadernos de Jazz que confió en mi cámara, en mi pluma y en mi pincel para aportar algo a su hermoso proyecto editorial que ya tiene más de 20 años.

Queda pendiente otro sueño, un concierto en Lo otro recordando un pasado que, afortunadamente tiene un presente intenso, con Horacio Icasto y Pedro Iturralde. Entre el público, amigos, pero no faltará Cifu, José Ramón Rubio, Raúl Mao, Gerardo Pérez, Javier de Cambra, Chema García Martínez,… y Alejandro Reyes, el inventor del San Juan Evangelista, otra persona que bien merece un homenaje por hacer que las cosas ocurran.

Y como decía y dice Cifu, “Besos, abrazos, carantoñas y achuchones para todos y todas, que seáis buenos.”